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| Luciana Mancini |
Por: Ismael Almeida
VALDIVIA, 14 de noviembre de 2025 – El Teatro Regional Cervantes, verdadero inmueble patrimonial y corazón cultural del sur, cerró su 90º aniversario con una gala memorable. La sala, testigo de nueve décadas de vida artística, recibió a la mezzosoprano chileno-sueca Luciana Mancini y a la Orquesta Filarmónica de Los Ríos (OFLR) en un concierto que fue más que una celebración: un homenaje a la perseverancia y la belleza.
Noventa años de memoria viva
Las butacas aguardaban en silencio. Noventa años. Cada telón levantado guarda la memoria de una ciudad que resiste. Este teatro no es solo ladrillo y madera: es el eco de risas de 1935, refugio de inviernos australes y plataforma de sueños. Cuando la Orquesta Filarmónica, dirigida con firmeza por Alejandra Rivas, hizo sonar los primeros acordes, el público contuvo el aliento. Bajo el brillo de las lámparas, Luciana Mancini ascendió al escenario. Su voz, de proyección internacional, no solo llenó la sala: devolvió pertenencia y excelencia a este rincón del sur.
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| Director Ejecutivo Juan Vásquez |
La fuerza artística y el respaldo institucional
Los 55 músicos de la OFLR mostraron solidez y compromiso, confirmando su papel en la descentralización cultural de Chile. Mancini, formada en el Real Conservatorio de La Haya y con trayectoria internacional, cautivó con una interpretación conmovedora. La unión entre la orquesta regional y su voz de talla mundial fue el punto culminante de la noche. La relevancia de la conmemoración se reflejó también en la presencia del Gobernador Regional Luis Cuvertino y del Director Ejecutivo Juan Vásquez, quienes reafirmaron que este aniversario pertenece tanto al arte como a la política cultural de la región.
Patrimonio cultural en movimiento
El concierto no solo miró al pasado: reafirmó que el Teatro Cervantes, bajo su condición de inmueble patrimonial, sigue siendo un espacio vital y activo. El aniversario, acompañado por otros hitos como las presentaciones de Roberto Bravo e Inti Illimani, consolidó al Cervantes como faro cultural. La celebración fue un éxito de taquilla y un recordatorio de la importancia de preservar y proyectar estos espacios. El Cervantes no solo celebra su historia: se prepara para seguir siendo escenario de los próximos sueños culturales del sur.
